Bon día a tuthom. Hoy nos vamos a cargar la etapa, lo normal es que se hagan unos 21 kms hasta Triacastela pero a nosotros nos parece poco y vamos a alargarla hasta Samos, osea unos 30 o más.
Cimas a la salida d O `cebreiro. Saliendo de O`cebreiro.
Desde O`cebreiro, rodeado de redondeadas cimas y encumbradas laderas, el Camino discurre por la sierra de Rañadoiro y, tras salvar el Alto do Poio, desciende hacía el valle donde se asienta Triacastela, el descenso se inicia por la trasera del albergue, por un camino serpenteando por las laderas cubiertas de pinos del Monte Pozo de Area, acaba por desembocar en una pista, dirección Liñares una vez pasado ese pueblo, por una senda llegamos al Alto de San Roque, donde nos hicimos algunas fotos.
José Luís en lo alto de San Roque esperándonos. Silvio junto al monumento al peregrino, San
Roque.
Clemente junto al peregrino, Alto San Roque. Telar en Hospital de la Condesa.
Clemente junto al peregrino, Alto San Roque. Telar en Hospital de la Condesa.
Hemos dejado atrás el Alto de San Roque, y vamos camino de Hospital de la Condesa, y Padornelo y otra vez subidita al Alto do Poio. En el Alto do Poio atravesamos la carretera y nos dirijimos pr un sendero paralelo hacía Fonfría.
Jose tocó las campanas en Hospital de la Condesa. Precioso pollo en el Alto do Poio.
José Luís acariciando un perrito,Alto do Poio. Conchi, Fulgencio y Clemente bajando Alto do Poio
No hay humedad en Biduedo, Lugo. Esto es un Meson en Bidudo.
No hay humedad en Biduedo, Lugo. Esto es un Meson en Bidudo.
Aqui en Biduedo nos paramos a desayunar, por fin un bocadillo maravilloso, pa amb tomaquet i pernil con un got de vi negre. En todo el camino habiamos comido los bocadillos a nuestro gusto, y es que los hacen con un pan muy grueso, muy seco y le colocan dentro lo que sea, y hay que comerselo como los hombres, en fin que entramos en este albergue, y la señora que nos sirvió nos preguntó que queríamos para comer, le pedimos pan con jamón, y nos dijo si le ponia tomate, amigo, le pregunté que de donde era y me dijo que de Manresa, estaba de voluntaria en este albergue, vaya bocadillo como disfrutamos Silvio y yo. Salud señora Hospitalera.
Estos amigos se pusieron delante de su artilugio de trabajo, Fulgencio despues de almorzar le va el arado, cosas de la tierra, y Silvio tirar de un carro de bueyes, casi na.
Clemente como es de esperar delante de la Iglesia de San Pedro, en Biduedo, y Silvio bajando de Biduedo hacía Triacastela.
Hemos pasado Biduedo, hemos almorzado y ya nos encaminamos en una baja infernal hacía Filloval, en el camino no se si exactamente en este pueblo nos salió una mujercita, con pinta de buena mujer, no se fien, quedan pocas gentes buenas, nos ofreció unos creps que parecía como si lo hiciera sin ánimo de lucro, que buenas gentes por aqui pensamos, pues no, aun no le habíamos dado el primer bocado nos pidió un euro por cada uno, por cada lamina de creps, bueno a mi me salió la mala leche, por tres quería tres euros, le dimos un euro y 60 centimos, y le dijimos que ya era suficiente, que engañara a otro.
Al final llegamos a As Pasantes, Ramil y Triacastela, me llamó mi primo Sebas, estuvimos hablando un rato, me dió ánimos, es de agradecer, nada más salir del pueblo se puso a llover, qe molesto es, porque tienes que parar abrir la mochila y sacar los trastos, colocártelos y ale a caminar lloviendo.
Arbol centenario a la entrada a Triacastela. Fulgencio y Silvio de Triacastela a Renche.
José Luís pasando por Lastres. Clemente de Fruituxe a Samos, precioso.
José Luís de Fruituxe a Samos. Vista del Monasterio de Samos.
Reliquia Seat-850 en San Martiño do Real. Otra reliquia Seat-600 San Martiño do Real.
Vista Monasterio de Samos. Silvio, José Luís y la famosa monja del camino.
En nuestro duro caminar de hoy, despues de unos 30 kms. ya llegamos al monasterio de Samos, donde encontramos un albergue, un poco rustico, pero bueno el camino casi todo es así. llegamos chorreando, en cuanto caen unas gotas el solo hecho de colocarnos la capelina y pantalones es que se suda lo indecible, no se sabe si estas mojado por fuera o por dentro, al final te das cuenta que es por los dos lados.
Este monasterio es una pasada, que maravilla, que construcción, se dice que es uno de los cenobios más antigüos de España, fundado en el S-VI por San Martin de Braga el cual ocupa más de una hectárea, perduran pocos restos medievales, aunque estos sean preciosos. Bien, como llegamos un poco tarde, nos fuimos a comer lo primero, y luego algunos lavaron sus ropas, las que no pudieron secar porque no paró de llover. Comimos en un bar muy bien, caldo gallego y bacalao al horno, una maravilla, ya dejamos las carnes en la gran castilla,en el monasterio pagamos 6 euros por dormir dos personas, y la comida nos costo 9 euros cada uno.
Nos fuimos a dormir despues de escuchar cantos gregorianos, cantados por los mojes benedictinos, ya por la noche no cenamos pero yo me fui con Alejandro un gallego muy cachondo y unos brasileiros y nos tomamos unas cervezas, charlamos cosas del camino y a la cama. Bona nit, familia, hasta mañana.
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